¿Son adictivas las setas alucinógenas?

Cuando uno va a probar o ya ha probado las setas alucinógenas, debido a que son clasificadas como drogas, es normal hacerse la pregunta que titula este post. ¿Son adictivas las setas alucinógenas? ¿Tienen un potencial adictivo como, por ejemplo, la nicotina o la cocaína?

En primer lugar, cabe destacar que no hay una respuesta única. Lamentablemente, cada persona es un mundo, por lo que lo que a ti te resulta adictivo puede no resultarle a tu amigo, o viceversa. Existen tipos de personalidad que tienden más a volverse adictas, ciertos rasgos como la impulsividad pueden sumar puntos.

Lo que vamos a comentar a continuación es por qué las setas alucinógenas NO contienen en su química un potencial adictivo como la nicotina o la cocaína. Es decir, las setas alucinógenas difícilmente van a crearle a tu cuerpo una necesidad orgánica de ingerir la sustancia como sí la crean otras drogas, pero esto no significa que no puedas volverte “adicto” mentalmente o le cojas cierto gusto (como puede haber “adictos” a cualquier afición o alimento).

La clave, como siempre, será medir lo que consumimos.

¿Qué hace adictiva a una droga?

El potencial adictivo de una droga depende de la forma en que interactúe con tu cerebro. Los neurocientíficos han señalado a un punto concreto del cerebro como “centro” de la adicción. Este centro (núcleo acumbens) es el lugar de nuestro cerebro que, por así decirlo, pone en consonancia nuestras emociones (positivas o negativas) con las conductas que acabamos de ejecutar. Es algo así como un detector de coincidencia entre lo que nos hace sentir bien y lo que acabamos de hacer para registrarlo y poder repetirlo en un futuro.

¿Son adictivas las setas alucinógenas?

Las drogas de gran potencial adictivo normalmente incrementan de forma drástica la dopamina (un neurotransmisor) en este núcleo. Por así decirlo, lo ‘hackean’ para hacernos sentir ese ‘subidón’ de inmediato. Un subidón que cuesta muy caro: esta variación orgánica en nuestro cerebro refuerza enormemente la conducta de ‘meterse la droga’, es decir, nos convierte en adictos.

Las drogas que proporcionan este ‘subidón’, esta explosión placentera e inmediata, de éxtasis completo, son, pues, drogas de alto potencial adictivo.

Entonces… ¿son adictivas las setas alucinógenas?

Nuestras amigas mágicas son psicodélicos. Estas drogas no persiguen el incremento artificial de dopamina cerebral para lograr ese ‘subidón’.

Los psicodélicos o alucinógenos son sustancias que trabajan incrementando los niveles de serotonina cerebral. Estos cambios cerebrales son cuantitativamente y cualitativamente diferentes e implican cambios en la percepción del mundo (percepción del yo, percepción del mundo) y una experiencia placentera, pero no nos llevan (en general, hay algunas variedades de setas y de psicodélicos que sí lo hacen) a un estado de éxtasis y/o euforia.

¿Son adictivas las setas alucinógenas?

¿Cómo incrementan la serotonina cerebral? La psilocibina y psilocina son sustancias que mimetizan nuestra serotonina cerebral, por lo que actúan como ella. Otros psicodélicos como el LSD o el DMT trabajan de la misma forma. Estas sustancias te harán experimentar visiones y sensaciones, te harán reír y pensar de manera diferente, pero difícilmente te convertirán en un adicto, hablando de manera orgánica. Si los tomas con cabeza, no te darán problemas, ¡como todo!

Otros alucinógenos como el MDMA o el Foxy tienen acciones estimulantes, por lo que estos sí tienen acciones adictivas más potentes.

Precauciones a tener

El problema con las setas alucinógenas es que causan una alta tolerancia. La tolerancia es la medida en que tu cuerpo puede adaptarse a una droga. Es decir, una droga con alta tolerancia significa que provocará cambios en tu cuerpo que harán que si tuviste unos efectos con una dosis de 5 gramos, la próxima vez tengas que incrementar la dosis a 7 gramos para que te den los mismos niveles de efectos.

¿Son adictivas las setas alucinógenas?

Debido a esto, tomar setas alucinógenas cada día o muy seguidamente no es la opción más inteligente. Recuerda que a altas dosis las setas alucinógenas son tóxicas e incrementar la dosis para salvar esa tolerancia puede traerte consecuencias desagradables.

En resumen…

Toma setas alucinógnas solo si no padeces ninguna psicopatología o enfermedad física grave. Tómalas si nunca te has mostrado especialmente adicto a sustancias como el alcohol. No las tomes si has tenido problemas de abuso de sustancias, de la naturaleza que sean. Y siempre, siempre, respeta las dosis recomendadas.

No hay nada mejor que hacerlo todo con cabeza, aunque sea perderla durante un rato.